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Recorriendo el Pasado

El presente a veces se hace pasado muy rápido y uno se queda en un limbo un rato, aturdido

Cuando vives te das cuenta que el presente es un nada perenne y quien sabe cómo en un segundo se torna en tremendo pasado

Andamos y andamos, muchas veces cansados, sin saber a dónde vamos; el pasado y el presente de la mano

Entre cuentos e historias, es uno quien la escribe, quien la narra o son ellas quienes se escriben con uno

El pasado y su capacidad fulminante de enternecerlo a uno con un simple recuerdo

De novelas y personajes, hay quienes dejaron su legado en una página en blanco y otros en  un punto y coma eterno

Tanto, tanto nos pasa hasta que ya no nos pasa nada.

Tanto sentimos, tanto creemos, tanto queremos hasta que se acaba todo

Cuando la vida se nos hace historia hecho pasado, casi se puede señalar donde terminó el capítulo

Mañanas de esperanza, tardes de amor, noches de anhelo y de nuevo… (Suspiro) ¡Qué recuerdos..!

Andares imperfectos y unas ganas completamente ciegas; miles de consecuencias que llovían. Una historia siendo escrita

El presente se hace añejo y uno perplejo; dos segundos y aquí vamos con un nuevo comienzo

El andar te enseña que no todas las historias pueden ser escritas a la vez. Es terminando alguna como se puede comenzar otra

No da tiempo de saber quién se es cuando ya se está siendo algo más

El paralelismo del tiempo y de lo que hacemos con él es hermoso.

Somos extras. Mientras nos ausentamos en otras; para ser villanos después de haber besado al protagonista

Yo me pregunto si sabemos qué escribimos, para quién, para qué y si a ese alguien le importa; si nos disfruta como narradores

Parece que la tarea es mirar hacia el frente para poder un día mirar lo lejos que hemos llegado

Tanto, tanto nos pasa hasta que se siente que ya no nos puede pasar nada

Gente que te hace favores porque pueden ver el futuro que te espera, se hacen parte del camino

Gente que te mira más allá de ti y queriendo que lo que imaginan sea mejor, te cambian la vida

Gente que decidió abandonarte sin decir nada, pero que entre tanto no notaste hasta que los necesitaste y no estaban; tenían tiempo idos

Esa historia hecha pasado que fue tanta que casi se siente presente

Tener un pasado no es algo que podamos elegir, para bien o para mal; estamos obligados a tenerlo

Sabrás que te lo estas disfrutando cuando tu pasado se vuelva tu mejor posesión

Tanta vida en esas lágrimas, esas de tristeza, placer y amor; todo eso en una lágrima nostálgica

Sabes que una historia se ha vuelto pasado cuando donde solía estar no está; pero si está el recordar que ahí estaba

Gente que quiso ser parte del cuento, porque amó como escribías y quisieron verse descritos y narrados por ti

Pasos que dejaron por siempre su estampa aunque ya casi no se recuerda que se hacía cuando se pasó por ahí

Cerrar un capítulo, hacer historia, crear pasados. Sin eso, un cuento no es más que una habladera interminable y sin sentido

Llevará tiempo volver a repetir un éxito como el ya escrito. A disfrutar de la página en blanco y prepara la pluma para la próxima locura

Caminos recorridos siguiéndole a alguien los pasos… A veces lo bonito es el poder recordarlo

Lo profundamente bello del ayer es poder decir que se tuvo

Lo infinitamente intenso del ayer es sentirlo de nuevo con fuerza en la piel

Todo tu hecho memorias, todo lo nuestro hecho recuerdos, todo eso mío.

 

 

 

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Mi Pasado, el presente, un futuro

Estas en el presente, cuando no te dejas abrumar por situaciones que probablemente vendrán pero aún no han llegado.

Vives el presente, cuando sólo te importa lo que estás haciendo ahorita y rápidamente te enfocas en ello y te olvidas de todo lo demás.

Estas en el aquí y en el ahora, cuando el mañana lo ves borroso y prefieres cerrar los ojos o mirar a otro lado antes que intentar enfocarlo.

Aprovechas este momento, cuando sabes que de lo plena y emotivamente que te entregues ahorita, depende todo lo demás que vendrá.

Tomas el hoy sin más, cuando el pasado te resulta un libro muy pesado para cargar y estar consultando a cada rato y con cada acción.

Estas viviendo hoy, cuando te sientes fresco y ligero a cada paso que das; no hay la pesadez del recuerdo y tampoco el ahogo del miedo.

Estas condenado por el yugo de tu pasado, cuando el solo pensar en recordar tu historia te decae o desanima.

Si tu pasado te avergüenza y por ello constantemente te esfuerzas por cubrirlo o disfrazarlo, siento decirte que no estás aquí y ni en el ahora.

Cuando tu pasado te apena tanto que pierdes el recuerdo de algunos de sus capítulos o escenas; siento decirte que  estás viviendo para huir de él.

Si tu pasado te resulta manual de traducción para el presente; siento decirte que estas matando cualquier posibilidad de futuro.

Si para ti, tu pasado es algo que muere cada día que termina, cada día que comienza será siempre la promesa del futuro que está a punto de vivirse.

Cuando truncas tus acciones por fobia a lo vivido, estás diciéndole a tu vida: ya te equivocaste, intenta llegar a la muerte sin hacerlo otra vez.

Cuando tu pasado dicta a dónde vas y hasta dónde llegas, estas caminando un sendero que termina en el comienzo del mismo.

El futuro es esa vista amplia y espléndida que todos los días uno ve, pero en la que no se vive

A veces pareciera que el futuro fuera una divergencia  de perspectivas, donde en un sentido ves una cosa y en otro otra; pero contrapuestos aparece perfecto frente a ti.

Es paradójico tanto el pasado como el futuro, son visiones globales de uno mismo; sin embargo al construir uno, es la única manera de ver el otro.

Pasado es la forma en la que miro, presente es qué miro y futuro es qué elijo mirar.

Pasado es cómo camino, presente es por dónde camino y futuro es hacia dónde.

Pasado mi expediente, presente la hoja en blanco, futuro el lápiz que anhela continuar escribiendo.

Pasado mi miedo y mi soledad, presente mi soledad y la oportunidad, futuro mi soledad de la mano de mi felicidad.

Pasado la pregunta, presente su respuesta, futuro la satisfacción.

Pasado el temor y el terror, presente la paz, futuro las ganas y lo demás no sé; tampoco es necesario.

Pasado la sombra, presente quien la proyecta, futuro el reflector que me apunta.

Si estás aquí y ahora, y no te hallas pleno, dispuesto y listo; el pasado te está endeudando o el futuro te está clavando intereses.

Suéltalo todo, pensar que todo puede ser previsto es estrangularte la realidad, déjate llevar y en tal caso que ella te estrangule a ti.

 

 

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Revolución Interna

Es que cuando la vida impacta, el amor estremece, la economía se jode (porque ella siempre se jode) y la cabeza explota no hay mejor expresión para describir lo que pasa que: Revolución Interna!

A mayor caos revolucionario, terriblemente muerto el estado de inercia era en el que se estaba.

A mayor somnolencia, más difícil y estremecedor será el despertar.

Los bajos fondos que uno puede llegar a tocar viviendo, son cuna de las más grandiosas fortalezas.

Una profesora admirada me marco el alma diciendo: los aprendizajes más bellos se dan en los momentos más dolorosos.

Creo que todo el que cae y bajo, debe tener en cuenta una cosa: tú te llevaste a la caída, toca salir y desde afuera ver cómo fue que pasó.

Es conmovedor salir del pozo y mirar con humildad infinita desde su cima, el fondo.

Solemos ver grande y con admiración a quien está en la cima o está con gracia y empeño llegando a ella, que errados estamos…

Quien cae bajo y vergonzosamente, es quien realmente está enfrentando el mejor de sus retos, salir de la miseria de su ser.

Luchar con el medio y sus obstáculos es vivir; luchar con tus grietas y sus abismales oscuridades es crecer y trascender.

Definitivamente los logros y éxitos son divinos aplaudirlos, pero nada más conmovedor e inspirador que verlos de quien renace después del dolor.

Es que un éxito real es sobreponerse a los propios demonios, todo lo grande que viene luego es celebración de la ya alcanzada transformación.

Parecerá extraño pero seguramente más de uno se ha encontrado con la confusa sensación de fascinarse hasta enamorarse de lo mágico de ver llegar el alivio de la luz a la par de la despedida nostálgica de la oscuridad.

Así somos, una libélula que a cada paso de su morfosis nos provoca un repertorio de sensaciones revitalizantes.

Que sería de nosotros siempre bien, siempre exitosos, siempre abundantes y dadivosos? No suena real, falta… faltamos nosotros.

Si bien es cierto que el éxito y la caída es algo que cambia la vida, hablar de ello poco podrá acercarte a esto, toca salir a la calle, arriesgar, perder y sentir.

Soy amante de las siluetas, las sombras y las medias luces; sin duda estas han marcado mi vida y me han hecho apreciar profundamente a quien como yo las tiene.

Quien como yo sufre, quien como yo ama, siente y vive… Encontrarnos en la convergencia de nuestras sensibilidades es inmortalizarnos en el más íntimo contacto.

Porque se necesita de uno como yo, para entender y reconocer a otro igual.

Si la inercia se instaura, la revolución se condensa y la vida se te está a punto de poner buena.

Los procesos son así, vayas en picada o a la cima; constantes, pacientes, consistentes; al llegar el momento no queda más que explotar.

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Cuando depender no te deja decir adiós.

Tener un amigo, una pareja o una familia en la que te puedes apoyar plenamente es muy satisfactorio, pero hay que estar alerta ante la dependencia.

La dependencia es un lazo que te arrastra hasta donde ese otro lado quiera ir, bueno o malo; pero que tal si nos soltamos y empezamos a trabajar nuestras fortalezas?

Soltarse significa descubrirse por sí solo, verse y no a través de los otros. Significa encontrarse consigo mismo y tal vez con un espacio vacío que no ha sido cultivado…

Eso da miedo, y el que se involucra en ese proceso voluntariamente, manejando su miedo prueba estar en proceso de desarrollo, pero y el que no? Cuándo se atreve? cuando por una pérdida no le queda otra salida que verse al espejo.

Vivir para cumplir las expectativas de los demás, significa, sacrificar lo que uno desea, apartar siempre lo que uno quiere y poner siempre primero la demanda del otro.

De tanto hacer eso, un día es muy probable ya no sepas quien eres, ni que quieres y solo puedas verte a través de la satisfacción o peor de la desaprobación que hacen los demás de ti.

Vivir en función de las expectativas de los demás, es estar constantemente atado a la ansiedad de la evaluación que hagan estos de tu actuación, de aprobarte la satisfacción siempre dura poco, de reprobarte la culpa es inminente…

Crecer, estar ante la línea limítrofe entre el joven dependiente y el adulto independiente (por supuesto imperceptible) es una real ambivalencia del miedo, por lo que se deja y por lo que se gana a raíz de lo que se deja.

Es decir adiós a una vida de comodidades, de consentimientos, de seguridad y no sólo económica, sino también afectiva, donde ante los obstáculos y los conflictos del mundo exterior, inmediatamente podíamos acudir a papá, mamá, pareja, etc.

Considero que se trata de decir adiós a la intimidad y familiaridad de la cual aprendimos a ser como somos hoy, para entonces salir al mundo de adultos y construir por nosotros mismos un nuevo núcleo seguro y estimulante afectivamente, para poder llegar a ser quien deseamos.

‎»Para decir adiós vida mía, que estaré por siempre agradecido…» Cerrar ciclos, hacer cierres, despedirse, es abrazar la oportunidad (aunque no siempre vista de esa forma) de lo nuevo, abrazar las posibilidades.

Todas y cada una de las posibilidades, porque como dicen «El mundo es tu ostra.» Tú la perla, la oportunidad de hacer de tu vida el escenario que siempre soñaste y tú la estrella como lo imaginaste.

Sabrás que ya estás listo para partir cuando las reglas de los otros te aprisionan, cuando las 4 paredes que has visto desde que tienes razón, ya no reflejan el hogar que sientes necesitar.

Sintiendo que ya es hora, es ahí donde  tu voluntad de decisión se presenta a ver si el miedo la dejará actuar.

Pudiera decirse que en ese momento se verá que tan listo realmente estas para permitirte ser libre, ser tú en la mayor de la extensión. Para verte y ya no a través de otros.

‎»Para decir adiós, sólo tienes que decirlo.» Cuando estés listo, a pesar de la resistencia que tu entorno pueda ejercer frente a este cambio, te irás, en paz, entusiasmado, optimista, dispuesto.

Un dato: no huyas de la despedida, dala y recíbela emotivamente. Sino estarás por mucho tiempo pensando en lo que dejaste atrás.

No huir de una despedida, demuestra tu fortaleza y de cierta forma tu inteligencia también.