Blog, Crecimiento, Psicología

Equivocarse no es igual a Fracasar

Así como cada oportunidad inspira, al mismo tiempo aterroriza

Para muchos una posibilidad no es vista como tal, sino como un riesgo aún mayor o aún más grave a fracasar

Para muchos la posibilidad del mañana, es la mejor razón para no actuar hoy

Para muchos la posibilidad del mañana, es la tranquilidad sin culpas de poder aplazar hoy

Una oportunidad tiene un porcentaje importante, casi totalitario de imprevisto, esto tiende a asusta a cualquiera

Fracasar no es como equivocarse, si eso fuera o si así de simple se viera, muchos ya lo hubieran intentado

Fracasar es confirmar cualquier duda que se tenga de uno mismo. Confirmar que tener esta duda es algo ya no imaginario, sino cierto

Fracasar implica pena, rechazo, vergüenza, dolor, rabia, impotencia y aunque no se quiera aceptación.

Fracasar, es el resultado único, al pensar en todo lo que no seré capaz de hacer si pienso en todo lo que tengo que se capaz de hacer para lograrlo.

Fracasar, es caminar la cuerda floja y no lograr mirar al frente, a tres pasos iré en caída libre al suelo.

Realmente el fracaso no es la equivocación, sino la anulación o bloqueo que ocurre cuando hay temor al error

Miedo a fracasar es como escalar una montaña y estar mirando siempre hacia abajo. Mejor decides no hacerlo para no pasar por eso…

El que fracasa de verdad, no lo llama así; lo llama error, falla, pelón, imprevisto, en fin; no le da significados extras, lo toma por lo que es.

Fracaso es la conceptualización de: no sirvo, no soy capaz, no podré, una vez más me equivoqué.

El que se resbala y cae, si es fracasado se molesta o llora o se esconde en una profunda pena. El que no, se ríe, se soba y se levanta

La tentativa del fracaso, está en cada esquina. Pero de tu mente

Miedo a fracasar es dejarte abrumar por las variables y sus posibilidades. Fracasar de verdad es dejarte llevar por el miedo y confirmar muchas de ellas

Te deja tu pareja, si eres fracasado afirmas que no eres para ser amado, algo tienes para no merecerlo. Si no, lloras lo perdido y te emocionas por lo próximo

El miedo a fracasar llega cuando sobrevuelas el laberinto y ves lo intrincado que es, no concentrándote en los pasos que de entrada tienes que dar

Miedo a fracasar es visualizar lo negativo y trancar tus movimientos a sólo evadir esto.

Miedo a fracasar es no aceptar que las posibilidades siempre estarán y que por más que las pienses, eso no te ayudará

Ante el miedo a fracasar hay que ser audaz. Un poco loco quizás, enlazarte al impulso que sin razón te invita a saltar

Por qué volverlo a intentar? Porque si! Porque puedo! Porque la última vez que lo hice viví y ya estoy lista para vivir de nuevo

Por qué volverlo a intentar? Por qué no?! Aquí estoy de nuevo, aquí está la oportunidad otra vez, por qué no hacerlo?

La mejor recomendación que puedo darles sobre el miedo a fracasar es: pregúntate, has hecho esto antes? No? Entonces cómo vas a atreverte a decir que no?!

Blog, Poemas

Hoy ya no puedo soñar

Hoy ya no puedo soñar, mi pasado ya no discute conmigo, mi presente esta a mi lado y mi futuro del otro… Hoy todo está bien

Hoy ya no puedo soñar; hoy estoy bien y ya no necesito saber mañana como estaré

Hoy ya no puedo soñar, la ilusión como escarcha yace regada en el piso y luego de barrerla no sé qué haré

Hoy ya no puedo soñar, donde antes estaba la emoción… en su vacío dejó a la tranquilidad

Hoy ya no puedo soñar… El amor ya no es una meta, ya es una cotidiana y hermosa realidad… Ya no tengo más que esperar

Hoy ya no puedo soñar, la joven que era ya no espera ni pide, construye y transforma… No hay más que anhelar, simplemente hacer

Hoy ya no puedo soñar… Y aunque algo de decepción yace, es más el aburrimiento de un deseo que ya no tiene razón de ser

Hoy ya no puedo soñar, la burbuja se ha acabado y aunque todo se ve igual de lindo… Me pregunto dónde quedó lo mágico

Hoy ya no puedo soñar, aquí estoy. Ni atrás ni muy delante. Aquí en el ahora

Hoy ya no puedo soñar, ni siquiera me preocupo por lo que vendrá, sólo estoy y soy por hoy

Hoy ya no puedo soñar y aunque es sano y tranquilo, no me gusta debo confesar

Hoy ya no puedo soñar y eso deseo cambiar, pero ya ni eso puedo

Hoy ya no puedo soñar… La realidad por fin me alcanzo y ahora comprendo porque luche tanto por huir

Hoy ya no puedo soñar, hoy ya logro en plenitud disfrutar

Hoy ya no puedo soñar, hoy logro profundamente descansar

Hoy ya no puedo soñar con lo irreal, hoy la realidad se me ha vuelto un sueño

Hoy ya no puedo soñar, por fin la idea de ser se fue, llego el ser como la mejor idea

Hoy ya no puedo soñar y aunque me aburro debo confesar, sigo disfrutando la realidad

Hoy ya no puedo soñar, las fantasías ya no son fantasmas, no lograrán asustarme más

Hoy ya no puedo soñar… Tampoco quiero, vivir en un sueño ya no es mi anhelo

Hoy ya no puedo soñar, vivir quiero y dejando de soñar por fin puedo

 

 

 

Blog, Crecimiento, Psicología

Acomplejado

Cuando la felicidad de otros te da tristeza sobre tu vida, eres un acomplejado

Cuando el dolor de otros, te da miedo de caer en sus mismos errores, eres un acomplejado

Cuando la rabia de otros, te alegra porque no eres tu quien la está viviendo, eres un acomplejado

Cuando lo que el otro siente lo usas siempre de medidor de tu propia infelicidad, eres un acomplejado

Cuando no ves al otro, aunque este te grite que lo mires; cuando sólo te ves lo que no tienes, lo que no has tenido, eres un acomplejado

Cuando en los demás solo puedes ver tus propios vacíos y sus profundidades, eres un acomplejado

Cuando estar al lado de quienes son felices te da pena, vergüenza o hasta temor. Eres un acomplejado

Cuando usas siempre al otro más medir tu propia miseria eres un acomplejado

Cuando la vida ya no es una oportunidad que tienes sino un esfuerzo que haces, eres un acomplejado

Cuando lo gris eres tú y no el clima, sin duda alguna eres un acomplejado

Cuando pateas al amor de tu vida porque se le ocurrió amar a algo tan pobre como tú, eres un acomplejado

Cuando te duele el aplaudirle los éxitos a otros cercanos a ti; siento decirte que eres un acomplejado

Cuando nada de lo que has tenido te ha resultado suficiente, pero todo lo que cualquier tiene lo quieres… Eres un acomplejado

Cuando eres incapaz de felicitarte, reconocerte o alentarte; porque hacerlo es como inaceptable… Eres un acomplejado

El complejo viene de todos los tamaños y formas, pero su raíz es la misma «yo no sirvo así, nadie me va a querer así, yo no me quiero así.»

Se te va la vida intentando parecer una cosa que en el fondo sientes que no eres? Estas acomplejado

El acomplejado es ese que frente al espejo le da la espalda, no abre los ojos o lo cubre con una manta. Verse es muy doloroso

Un acomplejado SIEMPRE te dirá exactamente que no tiene, que le falta, que carece; pero no podrá decirte lo que si tiene o merece

Quien acomplejado está no sabe de qué sufre, sólo siente que sufre e intenta desesperadamente no sufrir más…

Quien acomplejado está tristemente tiene una maravillosa habilidad para estropear todo lo bueno en su vida

El que acomplejado vive, no ve la realidad, sólo ve la catastrófica fantasía que ha creado a partir de ella

Un acomplejado no sabrá qué hacer con el reconocimiento… Lo desconoce

Un acomplejado finge con una palabra estar «bien» y con la siguiente explica por culpa de quién todo esta tan mal

Algunos acomplejados se crean alter egos, para enmascarar la fatalidad de no ser suficientes en la vida

Algunos acomplejados, síntoma que me impresiona absolutamente; aprenden a reír cada vez que quieren llorar y a hacer chistes de sus penas

Quien acomplejado está, sabe que todos estamos viendo sus complejos, no los oculta de nosotros, los disimula ante sí mismo

La realidad es que el acomplejado carga un látigo en la mano, sólo espera que le demos suficientes razones para fustigarse

Hay complejos que intentan cubrirse con arrogancia, incluso inteligencia, pero generalmente la manera más usual de «superarlos» es con belleza

Complejo es todo aquello no es como lo que yo quisiera que fuera. Complejo es la eterna frustración de medir la realidad con la fantasía

Quien acomplejado está compite y se desgasta por lograr su fantasía, negando su realidad cada vez más sumido en la frustración se encuentra

Acomplejado aquel que se mide con la vara inescrupulosa de los sueños y su irracionalidad

Acomplejado aquel que por desear una vida, da patadas a la suya

Acomplejado aquel que por alcanzar la vida que sueña echa a perder la suya.

Acomplejado aquel que en un acto de humildad forzosa, se condena a ser siempre la falta y castigarse con el deseo

Complejos muchos, incontables; todos atados a una ecuación: Qué y cuánto voy a necesitar para que me quieran?

Acomplejado el que llena su vida de lo que cree que debe y se apena por lo que siente que quiere

Acomplejado aquel que renuncia a saberse por apostar a rehacerse

Acomplejado el que apuesta a que su reflejo estará mal de alguna u otra manera y no se atreve a pensar que quizás pudo haber sido el espejo

Acomplejado aquel que nunca se ve a sí mismo, sino todo lo que pudo haber sido

Acomplejado el que no entiende que sus fallas son la diferencia, sigue pagando cuanto cueste para no tenerlas

Acomplejado… Pobrecito… Se maquilla una y otra vez… Esperado esta vez que el espejo no sea cruel

Acomplejado… Pobrecito… No sabe que el horror del reflejo, es de él

 

 

 

 

 

Blog, Crecimiento

¿Por qué hablamos?

Hay gente que se ladra, se escupe, se insulta… Dicen que están hablando…

Es fácil perderse entre las palabras, saber lo que quieres decir y para qué, no todo el tiempo se tiene claro. Es difícil hacerse entender.

Cuando hay frustraciones las palabras se golpean unas a otras compitiendo por poder salir y golpear a otro.

Resulta realmente un desafío cognitivo lograr contener lo que se quiere decir y terminar diciendo todo lo que se debe y necesita decirse.

Hablar muchas veces es ansiedad convertida en palabras y frases.

Hoy escuchaba a una pareja ladrarse el uno al otro. Era preferible que se quedaran en silencio… No entendí porque era mejor ladrarse.

Hablar mucho, muchas veces son ganas de no decir nada.

Hablar mucho, muchas veces son ganas de no decir lo que realmente se piensa o se siente.

Tantas palabras, tantas maneras, tantos tonos y lo que se quiere decir es «¡te amo!», «te necesito», «hazme el amor» o «te extraño.”

Me resulta curioso porque a veces hablamos tanto y nos empeñamos en hacerlo pero realmente no nos interesa decir nada.

Quien habla mucho puede que tenga miedo a quedarse callado… Puede que se dé cuenta que no tiene nada importante que decir.

Así cómo a la soledad, mucha gente también le tiene miedo al silencio…

Dime cuanto y de que hablas, te diré exactamente que intentas no decir.

El silencio pareciera ser la mejor respuesta ante cualquier ruido comunicacional. Calla y verás como todo pasa.

Si alguien llora, grita, sonríe o tiembla, ¿qué palabra se podría decir? Toca, abraza, sostén y calla.

Hablarte por no quedarme en silencio, es igual a estar contigo sólo por no dejarte solo.

Si te amo, ¿para qué hablarte de lo que tengo, no tengo, hago o quiero? Con mirarte y tocarte lleno todos mis silencios.

Si te amo, ¿para qué llamarte o explicarte mi anhelo? Con cada beso gritare mi deseo.

Si te amo, ¿para qué hablarte de preocupaciones? con el intento aguerrido de superarlas para no angustiarte tengo.

Las palabras entran donde las acciones no se coordinan.

Las palabras irrumpen donde los sentimientos no se materializan en encuentros.

Las palabras nacen donde los corazones ya no se tocan.

Cuando muchas situaciones no funcionan, las palabras son buenos puentes de conexión; sin embargo no necesariamente vuelven a reunir lejanías.

Lo cierto es que cuando tienes algo real e importante que decir, rara vez se usan las palabras para decirlo.

Yo conozco tres palabras que dicen más que muchas otras: «¿Lugar? ¿Fecha? ¿Hora?» Y al ser respondidas aclaran más de una duda.

Cuando necesitas quieres o tienes que hacer algo, las palabras jamás van a interponerse

Hablar sobre lo que necesitas nunca será tan productivo como ir tras ello.

No se necesita de una palabra para ser feliz, ni escucharla, ni decirla, no más vivirla.

Si nos ponemos a ver hablamos cuando no tenemos nada mejor que hacer.

No hablemos más, al menos no de lo que queremos para nuestras vidas, actuemos y ya.

 

 

 

Amor, Blog, Crecimiento, Psicología

De compromiso y algo más…

Compromiso es esto de soltar el control y entender que hay poco tiemo, sabiendo sin duda que quieres usarlo en hacer lo que te hará feliz, con todo lo que eso implica.

Compromiso es esto de entender que sigues siendo la prioridad en tu vida, pero ahora para hacerte feliz necesitas que los tuyos sean felices.

Compromiso es esto de entender que quieres ser feliz, sabiendo que contigo no te basta, para más felicidad hay que hacer felices a otros.

El compromiso real trae una paz, esa de saber que entiendes la realidad y aun así apuestas por ella.

Hacer un compromiso significa abandonar el miedo, nada es seguro y miedo perenne no es una opción; pero si lo que te atreves a hacer realidad.

Un compromiso habla de quien eres, que tan joven te crees, a que le temes y que tan capaz eres de apreciar tu realidad.

Asumir un compromiso sentimental, significa entender que el amor no va a pasar, a menos de que tu lo dejes pasar.

Tener un compromiso sentimental habla de lo mucho que crees en el amor pero sobre todo en que tan capaz de amar eres.

Hasta hace muy poco yo no sabía lo que la palabra compromiso realmente significaba, hoy ni siquiera hay q nombrarla, es algo que asumes y ya.

Dime que compromisos eliges para tu vida te diré que tanto eres capaz de vivir.

Compromiso, es echar raíces, llenar tu espacio y tiempo de reales posibilidades y propagar vida a partir de ti.

Hoy me pregunto por qué hoy si soy comprometida y antes no pude (porque lo intente). es simple: moría de miedo, no por los demás, por mi.

Uno pareciera obligado por la vida a comprometerse entendiendo la cosa como el peso de la adultez, por el contrario es la comprensión de la real libertad.

El compromiso definitivamente es parte de la vida, pero no necesariamente de la de todos.

Hay compromisos de hoy, de ayer y siempre habrá los de mañana.

Hacemos compromisos por dinero, por tiempo, por espacio también por sentir cuando, como y cuanto… Impresionante lo que somos capaces de asumir.

Hay que tener mucho corazón abierto para sentir con certeza que no hay miedo, en quien emprendió con nosotros el compromiso de vivir

Hacer un compromiso de amor te libera de esta humana finitud, en la entrega esta la comprensión

Hoy recordé mi pasado y frente a él me sentí otra, deseosa de haberme podido guiar mejor, eso lo hace el compromiso, cambiarte.

Siempre es un orgullo íntimo verse comprometido con el amor sano y real a sí mismo y sin duda eso beneficia el que tienes por otro

Estar comprometido significa estar consciente de no saber donde estarás mañana pero si estar seguro de donde quieres estar.

El dolor siempre te mostrara tu fuerza y junto al compromiso, no queda más que mirar a las posibilidades multiplicándose

Yo estuve comprometida con el miedo hasta hace muy poco, casi me empecé a psicotizar, hoy estoy comprometida con amarme, estoy casi que me caso.

Crecer te hace ver tus errores, te hace perdonarte y afianzarte, dejas de perder el tiempo y empiezas a comprometerte.

Muchas cosas uno pierde para entender el valor de un compromiso, ya luego tú eliges con que valores llenas tu vida y que estas dispuesto a perder por ellos.

Una vida es para caminarla con alguien, sin importar que digan, solos nacemos y morimos pero eso no significa que así queramos vivir.

Elegir quien camina contigo es el compromiso más humilde y devoto de todos.

Muchas personas vendrán a cruzarse contigo, todas te traerán lo que luego gustosamente disfrutaras con quien elijas y te elija a ti también.

Unos hacen compromisos para no estar solos, otros para siempre estar junto a otro, otros para simplemente ser feliz.

Falla en lo que quieras cuantas veces sea necesario y mientras más joven falla aun más, pero al casarte no, esa es para toda la vida.

Hay gente que no cree en “para toda la vida” válido, yo en cambio creo en prometer siempre seguir intentando, es lo mismo pero más franco.

El transcurso aquí es una cuenta regresiva, todo se va acabando, todos van a quitarte algo, con el tiempo aprendes a elegir a quien se lo permites.

Se falla y mucho no hay que tener miedo en decir eso, menos si es de uno mismo, la peor falla: todo está bien (no lo está).

La tristeza puede arroparte cuando asumes un compromiso con quien no tiene tiempo ni espacio para hacerlo, resulta en una constante estafa.

Cuando te comprometes, algo nace a partir de ti… Que cosa mas grande y satisfactoria que esa?